Por fin lo conseguí y estoy muy feliz. Recién ando probándolo así que esta entrada no tendrá muchos datos técnicos. Cuando ya lo pruebe todo y lleve un tiempo usándolo haré una nueva entrada contándoles mi experiencia y alguna que otra recomendación. Pero por ahora les cuento algunas de las razones que motivaron mi decisión de compra.
Primero, la pantalla. La pantalla fue un motivo de sobra para comprarme el iPhone X pues lo mejor es que no se queda sólo en el OLED sino que incorpora HDR 10 y Dolby Vision, dos estándares que le añaden mucha más calidad a la pantalla. Me gustó el ARKit y la realidad aumentada. ¡Y ni hablemos de lo mucho que me seduce el tema del reconocimiento facial!. También me gusta la idea de decirle adiós al botón y pasar a un iOS más gestual.
Otra de las cosas que pesó bastante en mi decisión fue la combinación de cámaras: su doble cámara trasera con f/2,8 que nos va a permitir disfrutar de grabación 4K a 60FPS por primera vez en un teléfono móvil, —sumado a que ambos sensores tienen capacidades OIS y un cuádruple flash true tone ?—, más una cámara frontal que tampoco se queda precisamente corta. Lo bueno también es que comprar un iPhone siempre me ha parecido una apuesta segura a largo plazo.
Pero para ser más honesta, lo que me hace aún más feliz es que con esta entrada inauguro una nueva sección en la quiero comenzar a mostrarles los gadgetcitos que voy consiguiendo. Siempre lo hacía a través de mis cuentas de Instagram o Twitter, pero esta vez quiero tratar de documentar mejor esos objetos que comienzan a acompañarme en mi vida.
Y ¿cuál es el último gadget que han conseguido y están disfrurando? Cuéntenmelo todo a través de la redes sociales o en la sección de comentarios. Recuerden que en todas las redes sociales estoy como @UnaGeek.